Festivales para correrse
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Tres festivales para correrse

La leyenda cuenta que Dios creó el cielo y la tierra y muchas más cosas, hasta que llegó el séptimo día y como estaba cansado se fue a Apricots, donde pudo relajarse y disfrutar como no hacía desde hace 7 días. El caso es que, tras el tercer polvete, se dio cuenta de que su obra estaba aún por terminar. Faltaba algo para que la vida del ser humano en la tierra fuese más amena y, pese a que el segundo día había creado a Apricots, sabía que no era suficiente para complacer a todo el mundo. Por lo que llamó en ayuda al más creativo e ingenioso de sus amigos: Lucifer.

– Mira, Dios, yo creo que lo que puede funcionar muy bien entre los humanos son las fiestas chorras”
– ¿El cumpleaños de mi hijo no es suficiente?”
– Jajaja, ¡qué malo eres! Pero me equivoqué, quería decir “fiestas de la chorra”
– Ésta sí que es una buena idea, Lucifer. Me pongo de inmediato a crear unas cuantas”

Fue así que nacieron celebraciones como el Aquelarre de Cervera, el Kanamara Matsuri de Kawasaki y el Sex Mountain de Java.

Aquelarre de Cervera – España

Durante el último fin de semana de agosto, los habitantes de Cervera se juntan para celebrar el aquelarre. Para quien desconozca este término, el aquelarre es una reunión de brujos y brujas hecha con el fin de realizar rituales y hechizos. Prácticamente es lo mismo que una reunión de miembros del PP con la diferencia de que en el Aquelarre de Cervera, Satanás no siente vergüenza en presenciar el acto. De hecho, en Cervera, Satanás está tan contento de ser el invitado de honor que, el último día, desprende toda su felicidad con una mega corrida encima del público. No sé a vosotros, pero a mí, sólo en pensarlo, me ha entrado sed.

Aquelarre de Cervera
Lo Carranquer

Kanamara Matsuri – Japón

Japón es famoso en todo el mundo por sus templos, sus tradiciones milenarias, sus tecnologías futuristas y sus habitantes con cabeza desproporcionada. Aún más desproporcionadas son las pollas que lucen durante el Kanamara Matsuri. Esta fiesta de la fertilidad, que se celebra cada primavera en la ciudad de Kawasaki, se caracteriza por la presencia de pollas enormes de papel maché acorraladas por gente completamente salida que las toca, las monta, las besa y vete a saber qué más cosas. De hecho mejor no saberlo, la ignorancia puede ser la mejor defensa contra posibles traumas cerebrales.

La tradición de sacar penes gigantes a pasear sorprende en un país donde el miembro viril es más bien pequeño. Bien al contrario de lo que puedas pensar, no se trata de un ritual para que las próximas generaciones de nipones nazcan más dotados. El origen de esta festividad está en la leyenda de un demonio que vivía dentro del chichi de una joven doncella.

La doncella se casó y la noche de bodas, su marido fue a deshojarle la flor. Pero su flor era más bien una planta carnívora, pues el diablo que vivía dentro de la vagina de la mujer, al ver el pene entrando en su cueva lo mordió y arrancó de cuajo. El marido murió desangrado. La joven se volvió a casar y lo mismo le pasó al siguiente marido.

El padre de la joven, preocupado por su hija, le dijo a todos los hombres del pueblo que se la follaran hasta sacarle el diablo del coño. Ya me estoy imaginando la escena: la joven en medio de la plaza mayor espatarrada, una cola larguísima de hombres ansiosos por follar y nerviosos al mismo tiempo por la posibilidad de morir a manos (o a labios) de una vagina. Pero claro, un polvo gratis, es un polvo gratis…

Después de matar por amputación de pene a la mayoría de hombres del poblado, el herrero tuvo una magnífica idea: fabricar un pene de hierro. Lo hizo, se puso a la cola del Gang Bang y cuando le tocó introdujo el primitivo consolador en la vagina dentata. El diablo mordió, se rompió los dientes y se fue pitando. Y desde entonces, los japoneses sacan a pasear penes de todas las formas y tamaños cada mes de abril. ¡Qué maravilloso país! Cuna del bukkake y del porno pixelado.

Kanamara Matsuri

Sex Mountain – Indonesia

Llega un momento en la vida de los indonesios en el que les toca ir en búsqueda de suerte y salud. Pero no así a lo loco, existe un lugar concreto al que tienen que ir: la montaña de Gunung Kemukus, también conocida como Sex Mountain. En este lugar sagrado, la suerte y la salud se consiguen echándose kikis con desconocidos, exactamente 7 veces consecutivas durante 35 días. Para que el ritual se cumpla es muy importante no follar con tu pareja, por esta razón en la montaña no faltan sagradas prostitutas.

Lo que salta más a la vista de todo esto no es el hecho de que esta montaña sea un burdel a cielo abierto donde la suerte y la salud se consiguen gracias al sexo (la mejor excusa del mundo para follar, vamos), sino que Indonesia es el país con el mayor porcentaje de musulmanes. Sabemos que el sexo es un tema absolutamente tabú para ellos y el adulterio es una práctica en la que si tienes suerte sólo te llevas unos latigazos, y si no eres tan afortunado, te lapidan.

Gracias a Dios, y al ingenio de Lucifer, el mundo es un sitio lleno de cosas maravillosas. Y de gente muy salida y viciosa. Teniendo que elegir a una de estas celebraciones, ¿con cuál os quedaríais?

*Foto de portada de Jordi Prat

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