¿Cuántas veces al día os tocáis allí abajo? Sí, habéis entendido bien. Allí abajo quiere decir “los huevos”, por si teníais dudas.
Para los hombres tocarse las partes íntimas es algo natural; surge y punto, sin que uno tenga el tiempo de darse cuenta. Pese a ser un gesto totalmente involuntario, si todos los hombres lo hacen es porque en el fondo les gusta y les da placer, sobre esto no tenemos dudas. Pero, ¿y si fueran dos manos expertas quienes las tocan? ¿Y si en lugar de tocarlas, las masajearan?
Por suerte existe el masaje testicular, una práctica que tiene su origen en las escuelas de masaje Thai tradicional y que parece ser que devuelve al hombre plena virilidad. No sabemos si esto es cierto, sin embargo estamos muy seguros de que provoca mucho placer y un rabo bien duro. Para que el masaje fluya mejor, las manos más expertas sugieren tener los testículos afeitados, aunque no es requisito fundamental para sentir el placer, es decir, si vuestras pelotas están más peludas que las piernas de vuestra suegra, las manos de nuestras chicas sabrán igualmente cómo llevaros al éxtasis.
El masaje testicular puede hacerse o en plan “amigueo”, en el sentido de que sólo serán simples caricias y mimos, o bien en plan “dámelo todo”, que sería la versión pro del “amigueo”. En esta segunda versión, las manos de la chica se desplazarán repetidamente arriba y abajo de vuestro miembro, o lo que se conoce como “hacer una paja”, hasta que la última gota que tenéis guardadas en las pelotas salpique sin control.
Ahora que sabéis un poco más sobre esta práctica, ¿con cuál os quedáis: versión «amigueo» o «dámelo todo»? Quizás lo ideal sería recibir primero unas pocas de caricias y después, cuando los huevos están a punto de cocción, pasar a las cosas serias. Sea como sea, nuestras chicas conocedoras y expertas del masaje testicular están deseado haceros descargar el estrés y las tensiones. Además, tras haber imaginado esas manos viciosas que os tocan, sabemos que ahora se os han hinchado los huevos y necesitáis un masaje en cuanto antes.
Cuando el cuerpo nos pide algo hay que prestarle atención, así que la próxima vez podéis pedir un masajito, que las chicas han empezado ya a encender las velas y preparar los aceites corporales.
Estas son las chicas que adoran hacer deliciosos y reconfortantes: masajes testiculares
